La barandilla de La Concha. Emblema de la ciudad.

Si hay algo que caracteriza a la ciudad es sin duda alguna la bahía de La Concha y como no, la barandilla que adorna sus playas, la cual se ha convertido a día de hoy en un emblema indiscutible de la ciudad.

No debía de ser nada fácil sustituir a José Goicoa allí por el año 1909 cuando éste solicitó su jubilación como arquitecto municipal, haciéndolo con un legado a sus espaldas tan grande como desconocido para la gran mayoría de los donostiarras de hoy.

No iba a hacerlo, sin embargo, un cualquiera, ya que por aquel entonces Juan Rafael ALDAY, ya era autor de numerosas obras en la ciudad, como por ejemplo el edificio del número 22 de la calle Prim, la ampliación del paseo de La Concha y LA CREACIÓN DE LA BARANDILLA DE LA CONCHA, entre otros. Por cierto, no creo que el señor ALDAY estuviese muy contento hoy en día con la dejadez del Ayuntamiento por conservar esta bella y emblemática obra, atendiendo al estado tan lamentable en el que se encuentran muchos tramos de barandilla.

No es mi intención contar la historia y obras de Juan Rafael GARAY ni sobre curiosidades de su vida, a las cuales se puede acceder pinchando sobre los enlaces, ni tampoco criticar la gestión del Ayuntamiento sobre su conservación, sino citar algunas curiosidades de la barnadilla que seguramente pasarán inadvertidas a muchos donostiarras.

* Son muchas las veces que paso por el mirador que hay junto a la zona de Los Relojes (sobre la discoteca "la Rotonda") y por dentro me rio cuando veo a numerosos turistas sacándose fotos junto a la barandilla de La Concha. No es para menos, ya que en sus fotografías va a salir una imagen única de toda la barandilla. Una imagen que tal vez jamás se darán cuenta de su peculiaridad y que posiblemente muchos donostiarras desconozcan.

Si recorremos todos los cientos de metros de barandilla, veremos que todas son iguales... ¡Todas menos una! Y es justamente una de las que están situadas en lugar al que me he referido antes.

Si observáis con atención, podréis comprobar cómo justo la pieza de la mitad del tramo de barandilla que aparece en la imagen está al revés. Si si, la flor mira hacia la bahía, hacia los bañistas y playeros, dando la espalda a los paseantes. El origen de ello lo desconozco, ¿fue un despiste?, ¿se puso así intencionadamente? Yo no lo sé, pero de lo que estoy seguro es de que es algo único. No hay NINGUNA otra pieza de barandilla al revés.

* La barandilla de la Concha ¡¡se puede comprar!!

De su fabricación y venta se encarga la empresa de Errenteria MENDIA Y MURUA. Pinchando el enlace se puede ver los precios y piezas disponibles. Según cuenta la propia empresa son muchas las personas que encargan piezas de barandilla para adorno de sus viviendas, negocios, etc. También en diferentes lugares de España se han colocado barandillas idénticas a las diseñadas por Alday para La Concha, lugares como Madrid, Marbella, playa Sain Sebastiá de Sitges, etc.

A diferencia de lo que mucha gente piensa, la primera pieza de barandilla no la hizo Mendia y Murua, como se ha dicho muchas veces, sino Fundaciones Molinario.

* Gran similitud entre la barandilla de La Concha con la barandilla de la gran escalinata del desafortunado y archiconocido TITANIC

Son nueve las coincidencias que presentan la barandilla de la playa de la Concha con las de la gran escalinata del barco. Las estructuras ornamentales fueron fabricadas el mismo año y con idéntico diseño pese a que sus respectivos constructores, el arquitecto municipal Juan Rafael Alday y el británico Thomas Andrews, no se conocían.

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